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De las calles Bogotanas al Palacio Liévano

Hace pocos días el nuevo alcalde de la capital colombiana decidió adoptar una perra criolla (Es así como se llama a un perro mestizo en Colombia) para dar ejemplo al resto de ciudadanos, muchos de nosotros diremos «Esto no es nada fuera de lo normal», pero en este caso, he de decir que hacerlo públicamente en un país donde el numero de perros callejeros es exagerado, no está nada mal. Pienso que fomentar estas acciones nunca esta fuera de lugar.

Bacata es el nuevo nombre que le ha dado su nueva familia, esta perra fue adoptada del centro de Zoonosis de Bogotá. Lugar al cual llegan animales abandonados, animales que nacen en la calle, etc. Bacata nunca imaginó que iba a tener la suerte de tener una familia y mucho menos de que iba a ser reconocida en todo un país.

Después de pasar unos días de «infierno», entre vacunas, registro en el Sirab y la peluquería, viene la recompensa: Comida diaria, atención personalizada y un sin fin de cariño que seguro le dará su nueva familia.

Bacata no solo fue adoptada para dar ejemplo, sino que también será la imagen de las campañas de esterilización canina y felina que se llevarán a cabo en la ciudad.

A parte de esta acción son muchas más las que quiere llevar a cabo el alcalde Bogotá respecto al animal y su protección. Esperemos que no quede en simples promesas de campaña sino que se lleve a cabo lo más pronto posible, ya que a veces la solución a un problema esta en la información.
Un ciudadano informado es un ciudadano con cultura, ¡cultura es respeto por nuestros animales!

Por anamilerc

Aprendiendo a gestionar blog para compartir mi compromiso con la tenencia responsable de mascotas.

2 respuestas a «De las calles Bogotanas al Palacio Liévano»

ME PERECE EXCELENTE QUE ALGUIEN EN ESTE PAÍS SE OCUPE DE SERES TAN MARAVILLOSOS COMO LOS PERROS; ELLOS NO SON LO QUE MUCHOS IGNORANTES PIENSAN SON MEJORES QUE LA RAZA HUMANA.

Hola Nancy, gracias por tu comentario, tiene mucha razón tus palabras. Es importante que en países como Colombia los ciudadanos comiencen a tomar conciencia de que no son los únicos que tienen derecho a vivir en dicho territorio. El respeto debe comenzar en nuestra propia casa. Un saludo!

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